Escucha Ahora
¡No solo sobrevivas, Crece este próximo año escolar!
Todos queremos que a nuestros hijos les vaya bien en la escuela. ¡Los maestros importan, pero tú realmente influyes!
Tú eres el primer maestro de tu hijo y el de toda la vida.
Involúcrate
Pide ser voluntario una o dos horas en la clase de tu hijo o en un evento escolar. Tus hijos pequeños estarán muy orgullosos de verte ayudar.
Llega a tiempo
Tu hijo comenzará el día feliz y preparado para aprender si llega a tiempo. Además, puede divertirse algunos minutos con las amistades que ve en la escuela antes de que inicie.
Sé proactiva
Asiste a todos los eventos y reuniones escolares como sea posible. Eres un miembro muy importante del equipo que ayuda a educar a tu hijo.
Sé real y comunícate con el maestro de tu hijo
Los maestros pueden entender mejor y ayudar a tu hijo cuando saben lo que está sucediendo en su vida. Si hay problemas que te preocupan en el hogar o en la escuela, pide hablar en privado con el maestro de tu hijo.
Sé constante en su rutina de hacer las tareas – cuando le sea asignada.
Establece esta rutina al comienzo del año escolar. Tu hijo se sentirá más seguro si viene a la escuela con la tarea realizada.
Para darle a su hijo una mejor oportunidad de hacer la tarea, estable un horario diario y un área tranquila para trabajar donde pueda concentrarse. Tenga lápices y papel a la mano.
Sé audaz
Pide ayuda al maestro con la tarea de tu hijo si la necesitas. A los maestros les encanta ver cuánto te importa y ver que deseas lo mejor para la educación de tu hijo.
Muestra interés
Tu hijo aprecia cuando tienes un interés sincero en su día escolar. Esto le mostrará a su hijo lo importante que es para usted.
Pida a su hijo que le cuente algo nuevo que haya aprendido cada día y pídale que comparta cualquier preocupación que pueda haber surgido. Comparta las preocupaciones de su hijo con el maestro si es necesario.
Sé alentador/a
Tu hijo encontrará el consuelo que necesita sabiendo que lo estás apoyando, especialmente si tu hijo tiene dificultades para aprender. Los niños triunfan más cuando se los elogia por su esfuerzo que por su talento o buenas calificaciones. 
Frases como:”¡Seguro que te has esforzado mucho en eso!” ¡Les harán crecer el cerebro! Cuando su hijo comete errores (así como todos lo hacemos), en lugar de remarcarlos, aliéntelo a no temerles. Los maestros saben que los errores son los que nos ayudan a aprender. Entonces, cuando su hijo se desanime, ayúdelo a decir “¡Aún no lo sé, pero lo haré!”.
Sé ingenioso/a y creativo/a
Realiza una caminata por la naturaleza con una bolsa de recolección y busca hermosos guijarros, rocas, semillas, vainas, palos, arena, hojas coloridas, corteza y más. Haz una foto usando esos artículos con papel y pegamento. Si tiene pintura, pinte un artículo y “selle” en todo el papel. Diviértete creando.
