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Reach UP
Es común oír hablar de María y del nacimiento del niño Jesús durante la época navideña. Por eso, al conocer el Proyecto Gabriel, pensamos que sería encantador pedirles que nos ayudaran a escribir una historia imaginaria sobre la conversación que podrían haber mantenido María y su tía Elisabet el mientras ambas estaban embarazadas.
El nombre “Proyecto Gabriel” hace referencia al relato bíblico del ángel Gabriel, que se le apareció a María y le anunció que había sido elegida para ser la madre del Mesías, Jesús. También le dijo que su tía Elisabet, que había luchado por concebir un hijo, estaba embarazada y en su sexto mes.
El Proyecto Gabriel se inspiró en el pasaje de la Biblia en el que María fue a hablar con Elisabet (Lucas 1:36-59). En el Proyecto Gabriel, mujeres mayores, llamadas “ángeles”, acompañan a las futuras madres durante el embarazo y más allá. Estos ángeles escuchan y aprenden mucho sobre cada madre y lo que está pasando en su vida. Ofrecen ayuda y amistad.
María, de quince años [Dado que la edad normal para contraer matrimonio en aquella época era de dieciséis años, se cree que podría haber tenido quince]. María camina hasta la casa de su tía Elisabet en Ein Karem.
MARÍA
(Mientras camina por el sendero, hablando consigo misma.)
Quizá podamos hablar y ella me entienda. Ahora mismo, me siento tan sola, ¡con amigos y familiares que no me creen! ¿Por qué iba a mentir sobre algo así? El ángel Gabriel apareció en mi habitación, asustándome al principio, y después de calmarme me dice que voy a tener un bebé que va a ser el Hijo de Dios. No había problema en que yo fuera virgen. Dios iba a obviar esa parte. Y, por Dios, las miradas que recibí cuando traté de defenderme. José, pobre José… pensó que le había engañado. Sólo me creyó cuando el ángel Gabriel le habló en sueños.
NARRADOR
María entra en la aldea donde viven Elisabet y su marido, Zacarías. Elisabet está en la puerta cuidando unas plantas. Levanta la vista sorprendida al ver a una visitante y saluda calurosamente a su sobrina.
ELISABET
María, ¿eres tú? ¡Cuánto tiempo! Has crecido, pero sigues siendo mi dulce María. ¿Qué tal estás?
NARRADOR
Finalmente, llegan a la pregunta que había que hacerse.
ELISABET
Tengo curiosidad, María, ¿por qué has venido a visitarme ahora?
MARÍA
El ángel Gabriel se me apareció y me dijo que no tuviera miedo, pero todavía lo tengo… un poco. Es más, no sé qué esperar. Me dijo que ibas a tener un bebé, y nada personal, pero, bueno, estás ….
ELISABET
Vieja. Puedes decirlo. ¡No es nuevo para mí!
MARÍA
Sí, (avergonzada). De todos modos, ya que usted tiene más tiempo que yo en esto – seis meses, dijo Gabriel – Sólo necesito estar con alguien con quien me siento cómoda y me puede decir qué esperar.
ELISABET
¿De cuánto estás? Y estás comprometida, ¿verdad? ¿José se quedará contigo o ya se fue?
MARÍA
Sólo unas semanas, tal vez un mes. Bueno, José no iba a decir nada y cancelaria el compromiso. Pero, (se alegra) ¡Gabriel se encargó de eso!
ELISABET
¿Tienes otro apoyo? Por ahora me tienes a mí, pero no puedes quedarte conmigo para siempre.
MARÍA
Um, creo que mamá será de más ayuda, especialmente cuando le cuente cómo TÚ me recibiste a mí y al pequeño bebé Jesús.
ELISABET
Creo que si. Ahora mismo, es bastante difícil que lo crea, pero tu cuerpo empezará a mostrar los cambios. Ohhh, los cambios. (Sacudiendo la cabeza). Zacarias apenas puede creerme cuando le describo las patadas. ¡Este bebe es un inquieto! Espera y veras.
MARÍA
Hmmm. Tengo tantas náuseas en este momento. No tengo ganas de comer, pero luego —
ELISABET
¡Quieres comértelo todo!
MARÍA
¡Sí!
ELISABET
Es bueno recordar que ahora comes por dos, no sólo por uno. Y pasa del vino en las fiestas. No es bueno para el pequeño.
NARRADOR
María estuvo tres meses con Isabel. Sin duda tuvieron muchas conversaciones sobre el embarazo, sus futuros hijos y cómo sería la vida con ellos. No sabemos mucho de los meses intermedios. Pero María regresó finalmente a Nazaret. Cuando estaba embarazada de nueve meses, el gobierno insistió en que todo el mundo viajara a la ciudad natal de su familia para inscribirse en un censo.
Así que José recogió a su prometida embarazada y recorrieron a pie los casi 145 kilómetros que les separaban de Belén.
MARÍA
José, ¡no creo que esto sea lo que ELisabet tenía en mente cuando dijo que me sentiría mejor si me mantenía activa! Creo que necesito sentarme un rato en el burro.
PROYECTO GABRIEL
Es muy bueno para una futura madre tener a alguien con quien se sienta segura de hablar de sus cosas. Elisabet fue una buena elección.
Reach UP
¿De qué preguntas cree que habrían hablado?
PROYECTO GABRIEL
Escribamos algunas de las preguntas que imaginamos podríamos hacer en esta conversación.
Las futuras mamás deben pensar en alimentarse bien. Puede que haya que empezar a adoptar nuevos hábitos. Si el dinero escasea, las mamás tienen que hacer rendir su dinero y esforzarse por encontrar los alimentos adecuados.
Me alegra decir que nuestros ángeles ayudan a las madres a encontrar contactos para conseguir alimentos, programas de vivienda e incluso atención prenatal, que es tan importante.
Reach UP
Y pensar que María no tenía nada de eso. La vida era tan diferente entonces. No había coches, aviones, ginecólogos, conocimientos sobre el cambio de hormonas, pañales desechables… y la lista continúa.
PROYECTO GABRIEL
Bastante duro. Hoy le preguntaríamos si necesita suministros para el recién nacido. ¿Necesita una cuna, ropa de bebé, una sillita para el coche?
Reach UP
No había una cuna bonita para el niño Jesús. Aunque las imágenes bíblicas suelen mostrar un establo de madera donde las vacas comían su alimento, los descubrimientos ahora revelan que se trataba de una gran piedra labrada. No era una cama blanda con bonitas mantitas.
PROYECTO GABRIEL
María fue una madre valiente, como muchas de las madres con las que hemos trabajado. La crianza de los hijos no debe hacerse en solitario. Pero a veces los padres y el resto de la familia no se involucran, o no pueden hacerlo. No hay que avergonzarse por buscar ayuda.
Si estás embarazada y no estás segura del camino que les espera a ti y a tu hijo, conectar con el Proyecto Gabriel podría ayudarte en los próximos meses y darte ese apoyo adicional que necesitas en este momento de tu vida. Para ponerte en contacto con la línea de ayuda confidencial, Asistencia al Embarazo, llama al 703-841-3810, o envía un correo electrónico a info@h4pw.org. En la web: www.HelpForPregnantWomen.org
Otras líneas directas de ayuda sobre el embarazo y recomendaciones: www.lifeoptionsnetwork.org
Llama o envía un mensaje de texto: LoveLine @888-550-1588
www.loveline.com
